El desarrollador surcoreano de humanos virtuales DeepBrain AI ha firmado un acuerdo para producir «servicios conmemorativos de IA» para la empresa de servicios funerarios Preedlife centrados en versiones virtuales de la persona que va a celebrar un funeral. Deepbrain llama Rememory a esta recreación sintética y presenta el concepto como una forma de que aquellos que amaron a la persona fallecida puedan tener una última reunión.

MONUMENTO CONMEMORATIVO

Rememory utiliza la tecnología de DeepBrain para simular rostros y voces humanas como réplicas digitales que imitan la forma en que alguien se mueve y habla. La IA construye los modelos visuales y de audio a partir de largas entrevistas en vídeo con la persona que planean recrear. Luego, se puede introducir en el modelo un guion con palabras y movimientos, y la IA lo interpretará de la forma más parecida posible al original humano. Los avatares humanos virtuales se utilizan como profesionales del marketing, presentadores de noticias, cajeros de bancos virtuales y educadores. Al parecer, el interés de los dolientes y de las personas que se enfrentan a la muerte ha crecido lo suficiente como para impulsar el nuevo acuerdo con Preedlife, que ofrece sesiones de 30 minutos con la creación de una IA antes del servicio fúnebre.

«Será una oportunidad para popularizar los servicios conmemorativos con inteligencia artificial y expandir una nueva cultura funeraria», dijo el CEO de Deepbrain, Eric Jang.

Casualmente, la también startup de vídeos sintéticos Storyfile ha empezado a experimentar con casi la misma idea. Gracias a su hijo, el director ejecutivo de StoryFile, Stephen Smith, pudo interactuar con los invitados a su propio funeral gracias a la inteligencia artificial de Marina Smith. En ese caso, el avatar conversó con todos los asistentes y respondió a las preguntas sobre la vida de Smith extraídas de las grabaciones realizadas antes de su fallecimiento. Storyfile ha descrito a los personajes de la IA como una forma de preservar los recuerdos de personas y eventos para el futuro, aunque solo sea para despedirse.